Sangre Bajo la Piel Cap.6

“Sangre Bajo la Piel” Cap. 6

-Esto es increíble ¡¡Yo, el rey de los vampiros, se acobardo al escuchar que alguien venia…!!¡¡Y huyo como toda una gallina!!- refunfuño sentado sobre el techo de la casa del arbol.
-¡Soy mas fuerte que cualquiera que hubiera habido allí abajo! ¡Que se dé por muerto!-Grito orgullosamente.
Se acerco al marco de la ventana dispuesto a atacar, pero paró en seco al oír los gemidos de dolor de fionna. Con mirada interrogativa se escondió en una esquina para escuchar la conversación.
-¿¿E-ella no me re-recuerda?? ¿No recuerda nada de lo que paso anoche? ¿Como lo pudo olvidar?-exclamo confundido luego de escucharlo todo.
-Esto fue idiota ¿¡Que no habia aprendido ya con el abuelo bubba?!
¡¡Los mortales son todos iguales, solo te olvidan y mueren, solo te olvidan y mueren!!-grito con lagrimas en los ojos, se acababa de acordar de su viejo amigo.
El dolor del recuerdo le clavo como una daga en el pecho y adolorido floto en dirección a su hogar.
-¡MARSHALL!-ML paro, y una velocidad increíble se izo invisible y entro a la habitación en donde la chica lo llamo.
-Pero…me llevó a casa ¿Qué paso?-pregunto la rubia al aire.
-Menos mal que te acordaste de mi, tonta.- pensó aliviado y como venganza por el susto, la empujo para que callera de espalda a su cama.
-¡¡Viejo…que dolor de cabeza!!-Se quejo.
-Ni me imagino como terminaras después de una noche de borrachera. Señorita delicada.-le contesto a sus adentros acostándose a un costado de ella.
Marsh miro a quien estaba a su lado, acostada en la misma cama que él, con ojos deseosos de que se diera vuelta y le dedicara una de sus dulces y acostumbradas sonrisas que le subían el humor.
Después de un rato intentando decidir hacerse visible o no la oportunidad se le escapo de las manos cuando la chica se levanto con dificultad hacia el baño.
El rey no pudo evitar que se le pasaran ideas pervertidas por la mente al escuchar la ducha encenderse, pero al igual que en su casa, nunca le aria daño ni se aprovecharía de su amiga, entonces se marcho a su cueva cansado.
Al llegar, abrió la puerta y de un salto se tiro con fuerza sobre el sillón, medio segundo después pego un grito y cayó al suelo.
-Maldita sea, este sillón ¡cien por ciento estilo y doscientos por ciento quiebra huesos!-maldijo dijo mientras estiraba su espalda para verificar si se le habia roto algo.
Al estirarse levanto la vista hacia la puerta y noto que habia nota en ella. Intrigado tomo el papel, que tenía un perfume riquísimo y con sangre decía:
¿Qué tal amor? Yo bien, excepto por los maullidos del horrendo dolor que larga tu hermosa gatita, es curioso ¿no? No se percato que la comida que supuestamente “tu” le dejaste tendría un veneno tan cruel…que inocente…una promesa, es una promesa.
Recuerda mi perfume.
Te ama: Ashly…”
El chico quedo shock por lo menos treinta minutos, mirando la nota, inerte, sin pronunciar palabra, tan solo…mirando.
-…Ashly…-pronuncio al fin.
-¡¡Maldita buja!!¡¿¡No solo me engaño y metió los cuernos, si no que tambien secuestro y enveneno a mi gata!?!-Grito dándole un puñetazo con todas sus fuerzas a la pared, así dejándola toda destrozada.
-¡¡Estés donde estés, te juro que cuando te ponga las manos en sima…!-
Luego de horas logro tranquilizarse, sentó en el suelo (ya que habia destrozado todas sus banquetas y no pensaba en sentarse en ese sillón) y miro nuevamente la nota. No decía un punto de encuentro, o iníciales, ni nada…solo decía:
Recuerda mi perfume.
Te ama: Ashly…”
-Aaagggss- Marshall entendió perfectamente a que se refería.
--------Flashback---------
-haaa fue un día muy largo y hermoso ¿no crees mar-mar?-suspiro Ashly apoyándose en el pecho de su novio.
-Ya lo creo amor, te dije que este lugar seria romántico-contesto Marsh.
-Todo es tan tranquilo…no entiendo como adivinaste, siempre soñé con pasar la noche en una playa-dijo sentándose en la fría arena.
-Tengo suerte de tener al chico mas tierno de toda nocheosfera-le tomo de la mano y jalo hacia ella.
-Suerte tengo yo al tener alguien que me tenga tan loco-dejo guiarse por su novia, así terminando acostado a su lado besándole con pación.
-¿Que te gusta de mi, he?-pregunto mientras que daban una pausa para respirar.
-Todo. Tu pelo, tu risa, tu cuerpo, tu fidelidad, tu perfume…-
-¿mi perfume?-pregunto.
-Sí, me encanta…me vuelve loco…soy tu esclavo cuando lo tienes-la volvió a besar, esta vez tomándola de la cintura.
-Con que eres mi esclavo… ¿me lo prometes?-le dijo con vos inocente.
-Si, por esta noche, soy tu esclavo, te lo prometo…-
-Humm…bien…-pensó un momento y luego se desabrocho su blusa celeste y la arrogo a un costado.
Marshall, sorprendido, se retrocedió un poco.
-Anda, ben no te morderé. Me lo prometiste. Vas a ser mi esclavo.-
-Pero…
-Nada. Calla y obedece.-
Marshall sonrió y se saco lentamente la camisa.
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-La oriya de la playa Versaye- Concluyo.
-Esa noche fue el día 29/02…faltan dos días…para el 29/02-penso y se dejo caer en suelo.
-Bruja espantosa, solo quiere jugar con mis sentimientos para que vuelva con ella-gruño.
-No caeré de nuevo en su trampa-parpadeo un par de veces, habían sido unos días y noches cansadoras y no habia dormido nada.
Cansado floto hasta su habitación para descansar.
Despertó la noche siguiente y con expresión seria preparo todo para irse la próxima noche. Cuando abrió la nevera para llevar algo de comer, la encontró rebosante de manzanas.
-Fionna.-el vampiro sonrió por primera vez en horas.
Mientras revolvía todo buscando las más frescas para el viaje, entre tanto rojo se destacaba algo blanco, suave y con largas orejas.
-Niña torpe, se le olvido algo-Tomo el gorro y lo acaricio lentamente, ya tenía una excusa para verla de nuevo.
El día marcado llego, y malhumorado por la pesadilla que tuvo en el día se vistió, cargo el equipaje y tomo el gorro de fi, que era su único consuelo para sonreír de vez en cuando.
-“Maloso vobiscum et cum spiritu”-pronuncio luego de haber tirado leche de insecto sobre una carita sonriente.
Una enorme grita se abrió sobre la pared, cobirtiendose en un portal en llamas, aun lugar como el infierno.
Marshall tomo aire y paso decidido.

Luego de unas horas de viaje en un  demonio de transporte llego a la playa Versaye, bajo y comenzó a rodear la orilla hasta que, a lo legos, pudo distinguir la silueta de su ex novia.
-Donde esta Schawelle.-pregunto secamente.
-Estoy bien, gracias por preguntar-respondió sarcástica.
-Quien diría que después de lo que pasamos aquí, en este lugar, en esta misma fecha y ya ni me saludas, eso es de mala educación sabes…-agrego con tono de víctima.
-No me importa lo que te suceda o se te pase por la mente perturbada que tienes, solo dame a mi gata y no te are daño-amenazo sin inmutarse de los comentarios.
-¡Cuidado, que se enoja! No quiero causarle problemas al señor oscuridad en persona…y menos que llegue a lastimarme-jadeo con voz seductora.
-Esto no es una broma, ¡ya dámela!-exigió poniendo ojos de demonio.
-Entiendes que no te la daré así de fácil ¡¿verdad?!-continuo con tono histérico.
-¿Qué quieres?-pregunto apretando los puños.
-Quiero que seas mi esclavo por esta noche…-se sentó la fría arena.
-Estás loca, me voy de aquí antes que la demencia sea contagiosa.- respondió girando hacia el camino fuera de la playa.
-¿Te olvidas porque vienes?-se levanto, izo un movimiento raro con sus manos y de su bolso saco a una gata blanca en una jaula maullando dolorosamente.
-¡Schawelle!-exclamo ML.
-Así es, que triste que les quede tan poco tiempo juntos, si es que sigues mis órdenes…-remato balanceando la jaula.
-Lo haré…solo déjala en paz-
-Siii!-dijo con alegría y tono infantil, dejo la jaula en el suelo y corrió hasta los brazos del chico.
Los dos empezaron a besarse fogosamente al punto que se tiraron a la arena. Marshall comenzó a deslizar su mano por debajo a la camiseta de la chica. Ashly rio satisfecha. La palma seguía, seguía…y para cuando se habia dado cuenta estaba viendo todo negro, en un movimiento rápido el vampiro habia usado su propia camiseta para taparle la cara rápidamente y así salir corriendo del lugar con la jaula y la gata.
-¡¡Abadeer!!-grito a no dar mas de la furia.
-¡¡La próxima te juro que te atrapare!!¡¡Ponte en mente que volveré, no me rendiré hasta matarte!!-
Se incorporo y bajo la camiseta, pero el ya estaba muy lejos. Aunque sabía que no lo alcanzaría comenzó a caminar con tranquilidad en dirección hacia a donde habia desaparecido.
Tan solo habia dado dos pasos y piso algo suave, bajo la cabeza y vio, tirado entre la arena, un bulto blanco. Lo levanto y estiro con curiosidad.
-¿¿Gorro de conejo??Pero de esto lo tenía Marsh antes de irse…es de el-lo acerco a su cara y lo olio.
-¡¿¡Tiene olor a mujer!?!-grito enfadada y con cara de demonio.
-Te di la oportunidad…ahora si me las pagaras…-dijo apretando el gorro con fuerza.
Marsh no podía a ver creído su suerte, pero aun lo podría alcanzar, entonces no paró hasta llegar a donde seria seguro y luego camino hasta llegar portal.
-En tu cara Ashly-Pensó Victorioso.
Tenía un pie dentro del portal cuando escucho unos gritos conocidos.
-¡¡Hay, asssggg, ya suéltenme!!-
El chico volteo confundido.
-¿¡Fionna?!-